Cali, Mayo 23 de 1995
Recordada Margara:
Efectivamente recibí tu nota del 5 pasado. En la presente quiero referirme a dos cosas:
1. Trabajo de Tesis.
En primer lugar leí desde hace rato los primeros apuntes de tu trabajo y me quedé esperando el resto, es decir lo relacionado con todo lo formal: el problema, los propósitos, la metodología, etc. Parece que esto llegará a través de la Universidad Católica, según tus comentarios.
Una lectura pertinente de los conceptos que fundamentan un trabajo de investigación debe realizarse en relación con lo que antes llamé lo formal, porque es a partir de dicha COMPARACIÓN donde se puede establecer la coherencia interna del trabajo y sus aportes al conocimiento científico. A pesar de no contar con lo formal y hecha la salvedad anterior me parece que los conceptos leídos se integran a sus visiones e intereses, lo cual es válido como referente central del investigador. En resumen, lo planteado en el documento son sus ideas escuchadas con paciencia y compartidas de corazón por mí.
Sabes que sobre algunas «ideas» o planteamientos tengo dudas, nacidas más de mi ignorancia que de la pertinencia. Resalto lo siguiente de lo leído:
- Lo nuevo, la aventura y el deseo de proponer otras cosas distintas. Me atrevo a asegurar que el retraso en educación se debe, en buena medida, a la falta de agresividad de nosotros los maestros. Los miedos, los temores…
- El espíritu de ir a lo desconocido. Es el aporte central de un auténtico profesional. Sus propuestas tienen la lógica del investigador porque invitan a ver más allá de lo que nos han mostrado o nos dicen.
- La referencia a la actualidad. Estar en el momento es una cualidad que debe acompañar la acción y la reflexión del trabajador educativo para no quedar a merced de la moda y lo que es peor del servilismo inútil.
Sería oportuno que discutiéramos acerca del principal problema que avizoro: ¿Cómo hacer para plantear como proyecto una experiencia que ya se desarrolló en gran parte? La respuesta necesita, además de ciertas reglas de redacción, una buena dosis de nuevas reglas mentales. La redacción no será serio problema si de antemano cambiamos algunos esquemas de imaginación y expresión.
Dado que el Proyecto es algo preliminar, previo al desarrollo del trabajo es necesario redactarlo teniendo en cuenta la abstracción de lo hecho, “olvidándonos” de lo pasado e imaginando que apenas se va a desarrollar. En este caso podríamos considerar al Proyecto como una idea preliminar, un punto de partida hacia el logro de “lo no conseguido”.
Entiendo lo conseguido como los talleres y sobre todo los resultados que ustedes han alcanzado con su ejecución en el colegio y las demás instancias que se concretan en la información que hay por sistematizar.
Otra cosa es la redacción del informe final. En éste se cuenta la cosa tal como ocurrió. El Proyecto es la idea y el informe final su realización por lo cual su redacción, para nuestro caso, es más fácil. Y lo es simplemente porque el estilo de redacción está de acuerdo con el esquema mental actual y lógico.
Veo el trabajo como el caso de sistematización de una experiencia investigativa, lo cual es perfectamente válido científicamente y además nadie tiene fundamento académico para pensar o decir que las investigaciones como informe final de los programas de formación deben responder a las definidas y desarrolladas al interior de su desarrollo curricular porque dónde queda la experiencia de los participantes de dicho programa de formación. Lo anterior equivaldría a decir que los maestros llegamos a las especializaciones sin ningún criterio, idea, experiencia, etc.; es decir bruticos, sin nada que mostrar y que el programa nos da todo, inclusive los temas y metodologías de investigación.
Defiendo la anterior idea a pesar de ser consciente que la mayoría de los participantes de los programas de formación tienen poca experiencia investigativa y algunas ideas pero qué se puede decir de sus docentes. La sensación que me queda es luchar para salir de allí porque hoy son participantes y mañana van a ser docentes. ¡Qué gran alivio saber que Uds. me van a reemplazar!
Con relación a los Parámetros para el informe final que Gloria Arrieta les entregó me parece que como todo esquema es válido. Hay que tomarlo como una guía organizativa institucional cuya lógica pertenece al programa para evaluar = medir los informes. En dirección de no encontrar muros de choque se puede aceptar, haciendo los ajustes respectivos porque de todas maneras su trabajo se sale de las ideas “escondidas” del llamado RAE. Escondidas porque dicho esquema para el RAE está dirigido únicamente para Planes Institucionales, entendidos como el documento que se entrega para que otros lo ejecuten y que contiene unos problemas (Diagnóstico) y unas propuestas (Programas y Proyectos).
Aunque me veo allí reflejado casi que textualmente, me preocupa que se distorsione la verdad de mí cuento: El Plan no es el único resultado de un proceso de planificación. El Plan se debe considerar como pretexto para introducir otros procesos y no como fin. Valen más los procesos (participativos, reflexión, autocrítica, investigación, etc.) que se promuevan que el mismo plan. En ésta dirección me parece que faltaría en el punto 5, Aspectos metodológicos, las etapas seguidas, las realizaciones, los hallazgos imprevistos, el sentir del investigador, etc.
2. Escritos Anexos.
Los agradezco y te confieso que me divertí al escaparme por minutos de la rutina. En verdad valoro gratamente tu compromiso personal-profesional en los escritos y a quien van dirigidos se ve reflejado tu inquietud e incertidumbre. El cuento es cierto y tan real como la situación descrita para el presidente y la ministra.
Aplaudo tu coraje para escribir así, el que me falta para avanzar. Me satisface reconocer en ti dicha cualidad con la esperanza que muchos copiemos para bien de nuestra profesión.
Aunque no encuentro el momento para seguir dibujando, lo hallé para pensar en ti por medio de nuestra correspondencia.
Saludos para Ligia, Lucho y tus hijos.
Un abrazo para Teresita.
Espero comunicación pronto.