EL SER HUMANO tiene la capacidad de evitar la enfermedad y mantenerse sano, sin ayuda externa, sólo con el conocimiento de SU SER.
La SALUD es el estado normal del SER HUMANO; la tendrá si se conecta con SU SER INTERIOR, y la perderá, si permite que lo desconecten de SU SER.
La Medicina es una disciplina, creada por los hombres, para transferir a los otros, sus miedos.
Para un médico poder serlo, tiene que conectarse con SU SER, esto equivale a apartarse de la programación que le ha hecho la Academia.
Requerimos, en esta época de transición, médicos que construyan formas de convencer a sus pacientes de la capacidad que poseen de enfrentar sus miedos.
Los médicos son lo más respetado en un mundo donde YO no debo SER, porque si SOY, me ACEPTO, me ENTIENDO, me ATIENDO, me DEFIENDO…. y ¿qué harían los que sin poder hacerlo, requieren dinero para subsistir?
La sociedad de consumo viene haciendo de la medicina una mercancía. Avanza la Ciencia y crecen los laboratorios súper especializados para que un SER HUMANO, ayudado por computadoras y sustancias de todas las especies y formas, pueda decirle a OTRO SER HUMANO qué le sucede en su organismo y lo autorice a aplicarse una serie de medicamentos.
Como diría mi tío Jaime:
Tengo un vecino que no podría tildarse de drogadicto porque las únicas drogas que consume son: Librium, Valium, Ecuanil, Sinogán, Cuait D, Carbamazepina, Ziprexa, Clozapina, Rohypnol, Somese, Ativán, Cholipin, Tryptanol, Necrotón, Betanecroton, Virex, Vircidal, Hiderax, Ranitidina, Ibuprofeno, Mejoral, Veramon….
El organismo humano es perfecto. El avance tecnológico y científico, en vez de reconocer al SER HUMANO su infinita capacidad de VIVIR, lo ha enredado en su propio miedo.
Otros, hemos decidido demostrar que el SER HUMANO puede ENCONTRARSE para VIVIR en PAZ y ARMONÍA consigo mismo, con sus congéneres y con el UNIVERSO, integrándose a él.
